La imposición de manos

La imposición de manos


Por tanto dejando las enseñanzas elementales acerca del Mesías, avancemos hacia la madurez, no echando otra vez el fundamento del arrepentimiento de obras muertas y de la fe hacia Dios, de la doctrina de los bautismos, de imposición de manos, de la resurrección de los muertos y del juicio eterno. Y esto haremos, si Dios lo permite. (Hebreos 6:1-3)


La Doctrina de la imposición de Manos

Generalmente en pocas oportunidades tomamos verdadera conciencia de esta doctrina en especial, la imposición de manos es una Doctrina, y como hemos dicho anteriormente, el termino doctrina significa literalmente: ‘lo que se recibe’. Por tal razón es también una doctrina la Cena del Señor, pues Pablo asevera que la había recibido del SEÑOR. Naturalmente todas y cada una de las doctrinas, fueron recibidas de parte de Dios y no como una necesidad ministerial del momento, pues en los concilios apostólicos Dios hablaba a los ministros dándoles instrucciones de como debían llevar a la Iglesia. Solo que estas instrucciones eran del Espíritu, es por tal razón que en la Biblia nos encontramos con la frase: ‘Ley de la Libertad’, ‘Ley del Espíritu’ (Romanos 8:2) y la palabra Torah se traduce comúnmente como Ley; si bien la traducción mas acertada seria ‘Instrucción’, la Instrucción del Espíritu Santo, la Instrucción de la Libertad: (2 Corintios 3:17)

En este orden de ideas, debemos prestar mucha atención a esta doctrina recibida de parte de Dios, pues si bien encontramos muchos versículos, tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, en donde leemos de aquellos que impusieron sus manos, la Biblia nos alerta de ciertos peligros que pueden sucederse si no lo hacemos conforme a como Dios lo ha mandado. Por tal razón espero que todos aquellos que lean este estudio puedan ‘recibir’ estas palabras, puesto que solo recibiéndolas se transformaran en ‘Doctrina’. De veras cuando profundizamos al respecto nos asombramos de ver hoy la soltura con la que muchas veces los pastores o evangelistas o cualquier ministro, comienzan a poner sus manos sobre cualquier cabeza que se le cruce. Mientras que la Biblia nos exhorta a imponer las manos, nos previene también de hacerlo. La pregunta es: que hacer? Algunos pensaran no poner mas sus manos, y esto a la verdad esta mal; y otros sin importarle mucho toda la cuestión, seguirán poniendo sus manos indiscriminadamente, lo cual también es incorrecto. La buena noticia es que en el Evangelio precioso de Jesucristo existe una palabra que siempre debe traducirse en actitudes: EQUILIBRIO. El ser equilibrado nos llevara a la victoria en todas las áreas de la vida cristiana y secular. Estar en equilibrio es estar en el medio, y muchas veces es difícil, recordemos que Jesucristo murió en el medio, en medio de un malhechor arrepentido y otro persistente. (Juan 19:18)

‘No impongas las manos sobre nadie con ligereza, no compartas así la responsabilidad por los pecados de otros; guárdate puro.’ (1 Timoteo 5:22)

Note el consejo de un ministro experimentado a otro ministro que esta comenzando a dar sus primeros pasos, el viejo Pablo conocedor de muchos misterios de pronto pone en aviso a Timoteo del tremendo peligro que es imponer las manos CON LIGEREZA. El problema no esta en imponer manos, sino en hacerlo CON LIGEREZA, esta voz griega ‘tacis’ significa hacer algo apresuradamente, con rapidez, hacer algo precipitadamente, muy pronto. Es decir que no se debería imponer manos apresuradamente, aquí si somos estudiosos y no nos desprendemos de un contexto tan enorme como lo es en este caso toda la Biblia, entenderemos que no se esta hablando de rapidez o lentitud en cuanto a tiempo, sino que no se debe imponer manos sin antes analizar por el Espíritu la condición en la que se encuentra cada persona a la que debemos ministrar. Podríamos decir que la doctrina de la imposición de manos debe ir acompañada con el discernimiento de espíritus (1 Corintios 12:10). De no ser así el ministro, que puede ser cualquier hijo de Dios delegado por aquel a quien obedece y se sujeta (Hebreos 13:17), cuando este ministrando, es decir ‘dando’, puede terminar ‘recibiendo’ lo que no es bueno, es decir que ‘comparte’, ‘forma parte de’, ‘participa’ de los pecados de aquella persona que pueda tener contaminación en la carne y en el espíritu:

‘así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios.’ (2 Corintios 7:1)

‘A algunos que dudan, convencedlos. A otros salvad, arrebatándolos del fuego; y de otros tened misericordia con temor, aborreciendo aun la ropa contaminada por su carne.’ (Judas 22, 23)

aquí estos dos textos nos indican que existen contaminaciones de las cuales debemos cuidarnos, sin caer en un extremo LEGALISTA, pues ellos mismos, como payasos, procuran que nadie los toque, no dan la mano y mucho menos un beso, pues estos ridiculizan el evangelio hasta llevarlo a un extremo que lastima a todo hombre, haciéndolos sentirse sucios, indignos, y de este modo no pueden luego percibir la GRACIA bendita de Dios. NO, no estamos hablando de esto, así como tampoco lo hacían los apóstoles Pablo y Judas; pero no podemos ignorar que por medio de imponer manos un hombre por mas sincero y limpio que sea, puede participar de pecados ajenos. Como puede ser esto?, la respuesta es sencilla: así como se transmiten preciosos dones espirituales por medio de la imposición de manos, también cabe la posibilidad de conferir otras cosas:

‘No descuides el don espiritual que esta en ti, que te fue conferido (dado) por medio de la profecía con la imposición de manos del presbiterio.’ (1 Timoteo 4:14)

En el pasaje que acabamos de leer, encontramos que la imposición de manos es acompañada con profecía, lo cual explica que no es simplemente un rito eclesiástico, sino que en ese instante esta implícita o explícitamente desarrollándose una actividad profundamente espiritual. Es decir que la doctrina de la imposición de manos nos enseña que con esta actividad siempre se esta confiriendo algún don espiritual con el fin de ‘adornar’ a la iglesia, y no para despeinar a nadie. Ahora quizás muchos de los que están leyendo estas cosas piensen en las oportunidades en las cuales les impusieron manos, y tal vez piensen que en una oportunidad no sintieron nada mientras que en otras si; pero esto en ninguna manera representa que cuando sentimos algo recibimos de Dios y cuando no, no recibimos. Porque nuestra vida no se rige por lo que sentimos, sino por lo que creemos: No andamos por vista (por los cinco sentidos), sino por fe.

Mas arriba hemos hablado del cuidado que debe tener el que ministra cuando impone sus manos, pero ahora hablaremos de quienes son los AUTORIZADOS para imponer manos, y luego hablaremos de los beneficios de llevar a cabo tan preciosa doctrina elemental.

En la Biblia nos encontramos con ciertos hombres que no tenían sus manos en perfecto estado, los cuales son figura de aquellos que no deben de llevar a cabo dicha imposición:

Manos autosuficientes:

‘Y el SEÑOR dijo a Gedeon: El pueblo que esta contigo es demasiado numeroso para que yo entregue a Madian en sus manos; no sea que Israel se vuelva orgulloso, diciendo: Mi propia mano me ha librado.’ (Jueces 7:2)

aquí nos enfrentamos ante el problema de aquellos que piensan orgullosamente que su propia mano es la que libera, o la que imparte algún don espiritual, o hace cualquier milagro. Notamos que Dios es claro en cuanto a esto: Dios no comparte Su gloria con nadie… Es por esta razón que no se trata de aplastarle la cabeza a nadie, ni de empujar a nadie, ni despeinar a nadie, puesto que los tales que así hagan están diciendo con sus actos: Es mi mano la que esta haciendo las cosas. Los tales no podrán imponer sus manos hasta que sientan que es necesario menguar, es entonces cuando Cristo crecerá y manifestara su Gloria.

Manos secas:

Y aconteció que cuando el rey oyo la palabra que el hombre de Dios había clamado contra el altar de Betel, Jeroboam extendió su mano desde el altar, diciendo: Prendedlo! Pero la mano que extendió contra el se seco, de modo que no podía volverla hacia si.’ (1 Reyes 13:4)

aquí nos enfrentamos ante otro problema aun mas grave. Si leemos desde el capitulo 12 de 1 Reyes, vamos a encontrar que el rey Jeroboam hizo dos becerros de oro e insito al pueblo a la idolatría, es decir que no solo el cometió idolatría sino que también arrastro al pueblo. Como resultado su mano quedo seca. Aquellos que se mezclen con la idolatría, tendrán la mano seca. Ahora bien, cuando hablamos de idolatría no solo hablamos de postrarse ante otros dioses, sino de rendirles culto en el corazón, o teniendo ADORACIÓN por alguien: como esas frases de enamorados: Te adoro… Pero no solo se reduce a esto, la Biblia incluso ahonda un poco mas y dice:

1 Samuel 15:23 – Porque la rebelión es como pecado de adivinación, y la desobediencia, como iniquidad e idolatría. Por cuanto has desechado la palabra del SEÑOR, El también te ha desechado para que no seas rey.

No es casualidad que Dios compare a la idolatría con la desobediencia, apuntemos esto en nuestro corazón y examinémosno si existe dentro nuestro rasgos de desobediencia…

Efesios 5:5 – Porque con certeza sabéis esto: que ningún inmoral, impuro, o avaro, que es idolatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios.

Otra revelación que encontramos en las Escrituras es que aquellos avaros son idolatras, por lo cual debemos de abandonar, en el caso que haya que hacerlo, toda avaricia que exista en nuestro corazón. Y el remedio para que el amor al dinero se vaya lo dejo establecido Dios en su Palabra: Diezmando. Al diezmar, y mas aun cuando se hace Rhema esta palabra, el amor o atracción por el dinero se va, y no nos importa retenerlo, sino que con LIBERALIDAD damos, y con LIBERALIDAD RECIBIMOS.

La consecuencia de la idolatría es sequía, y sequía significa que toda el agua se fue, ya no hay agua: sequía es falta de agua. El tema se extiende mas aun cuando pensamos que el agua es el Espíritu Santo (Juan 7:38), el agua es la Palabra (Juan 15:3) y sin agua en nuestra tinaja, el SEÑOR no podrá darnos gozo (Juan 2:7), puesto que el vino representa el gozo. Entonces sin Unción, sin Palabra, sin Gozo si alguien ministra de esta manera que recibirá el que es ministrado? sequía, pobreza de espíritu, desanimo, tristeza conforme al mundo, etc. Alertas!

Manos violentas:

Proverbios 6:16-19 – Seis cosas hay que odia el SEÑOR, y siete son abominación para su alma: ojos soberbios, lengua mentirosa, manos derramadoras de sangre inocente, un corazón que maquina planes perversos, pies que corren rápidamente hacia el mal, un testigo falso que dice mentiras, y el que siembra discordia entre hermanos.

aquí nos encontramos con aquel que derrama sangre inocente con sus manos. En la Biblia esto es sinónimo de violencia. Cuando David quiso edificarle casa a HaShem, Dios le dijo que sus manos que habían derramado mucha sangre no podían edificarle Casa, sino que su hijo Salomon, hombre pacifico le levantaría Templo:

‘Llamo entonces David a Salomon su hijo, y le mando que edificase casa a Adonai Dios de Israel. Y dijo David a Salomon: Hijo mío, en mi corazón tuve el edificar templo al nombre de YHWH mi Dios. Mas vino a mi palabra de Adonai, diciendo: Tu has derramado mucha sangre, y has hecho grandes guerras; no edificaras casa a mi nombre, porque has derramado mucha sangre en la tierra delante de mi. he aquí te nacerá un hijo, el cual será varón de paz, porque yo le daré paz de todos sus enemigos en derredor; por tanto, su nombre será Salomon, y yo daré paz y reposos sobre Israel en sus días. (1 Crónicas 22:6-9)

El que ministra esta ‘edificando’ el Templo de Dios, y aquellos violentos no podrán edificar al Cuerpo, sino solamente aquellos que sean como Salomón: pacíficos. Es decir que otra de las características que descalifica a aquel que desea ministrar haciendo imposición de manos es tener un carácter iracundo y violento. No esta permitido que aquel que acaba de golpear a su esposa vaya a imponer sus manos a otros, puesto que la violencia se transmite. No hace falta que derrame sangre literalmente, solo que es figura del violento, el que golpea con sus manos y con sus palabras, las cuales ambas pueden transformarse en armas mortales, y tanto la una como la otra traen resultados muy similares, ambos desastrosos, puesto que la persona que es golpeada en lo físico también lo es en lo emocional, siendo incluso mas preocupantes las heridas emocionales que las físicas puesto que estas ultimas suelen cicatrizar mas rápidamente, mientras que las emocionales pueden llevar décadas, y, sin una ministracion adecuada, incluso pueden ser llevadas durante toda la vida.

Manos impías:

Salmo 71:4 – Dios mío, rescátame de la mano del impío, de la mano del perverso y del violento.

aquí vemos que a las manos violentas se le suman las manos impías y perversas. Un impío es alguien que antes fue pió pero se aparto, aquel que abandono la piedad. El que ministra debe ser piadoso. La falta de piedad, de misericordia, de bondad, de compasión pueden transformar a cualquiera en legalista, es decir: un falto de gracia y benevolencia. El que ministra debe saber que el también ha caído y que fue levantado, que también es barro y se cae y se rompe en quebrantos. La falta de piedad imposibilita o debiera imposibilitar a que alguno ministre. Noten el ruego desesperado: ‘rescátame de la mano del impío…’ Cualquier síntoma de impiedad debemos ministrarlo de inmediato, antes que sea demasiado tarde.

Manos perversas:

Mas adelante ruega a Dios que lo rescate de la mano del perverso, sin dudas el salmista sabia lo que pedía. Un perverso, según el diccionario, es aquel que ha cambiado el bien por el mal, alguien que corrompe alguna cosa. En definitiva el perverso es aquel que esta pervertido y pervierte lo bueno que lo rodea. aquí no solamente podemos hablar del perverso sexual, que de por cierto lo hay, sino de todo aquel que pervierte una cosa cualquiera sea, el tal NO puede ministrar, pues perversión impartirá al pueblo del SEÑOR.

La Biblia habla de los que pervierten sus caminos: (Proverbios 10:9) Los que pervierten las palabras de Dios: (Jeremías 23:36) Los que pervierten el derecho: (1 Samuel 8:3) Los que pervierten el evangelio de Cristo: (Gálatas 1:7) Los que así mismos se pervierten: (Tito 3:11) Los que pervierten la gracia: (Judas 4), etc.

Manos leprosas:

Y dijo Dios: Ahora mete la mano en tu seno. Y el metió la mano en su seno, y cuando la saco, he aquí, su mano estaba leprosa, blanca como la nieve. (Éxodo 4:6)

Existen dos blancuras que se comparan con la nieve, el pecado, que estaba prefigurado con la lepra, y el perdón de los pecados por medio de la limpieza, producto de un genuino arrepentimiento. Entonces no se trata de estar blancos, sino limpios. No es cuestión de colores, sino de limpieza.

‘Venid ahora, y razonemos – dice Dios – aunque vuestros pecados sean como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; y aunque sean rojos como el carmesí, como blanca lana quedaran. (Isaías 1:18)

aquí la Palabra nos indica que cuando nos limpian de la mancha del pecado, nos volvemos blancos como la nieve, pero lo curioso es que cuando se peca uno se vuelve blanco como la nieve, entonces no es cuestión de blancura sino de limpieza. El pecado es muy peligroso para el que ve lo de afuera, alguien puede ver blanco a un ministro, pero entonces habrá que investigar a que se debe la blancura, si a la limpieza, o a la lepra. El que ministra debe de arrepentirse, cambiar de actitud y limpiarse con la sangre de Jesucristo que limpia TODO pecado por mas grosero que sea (1Juan 1:7).

Manos imposibilitadas:

Jueces 1:6-7 – Huyo Adoni-bezec, pero lo persiguieron, lo prendieron y le cortaron los pulgares de las manos y de los pies. Y Adoni-bezec dijo: Setenta reyes con los pulgares de sus manos y de sus pies cortados, recogían migajas debajo de mi mesa; como yo he hecho, así me ha pagado Dios. Lo llevaron a Jerusalén, y allí murió.

En este pasaje nos encontramos con un hombre cual que le cortaron los pulgares de los pies y de las manos. Vamos a ver que implica la ausencia de los pulgares en un hombre, y por que es un impedimento para ministrar, es decir: imponer sus manos.

En el Antiguo Testamento nos encontramos con muchos ritos que muchas veces no comprendemos porque nos parecen raros; pero todo aquello era simplemente una sombra de lo que habría de venir.

Éxodo 29:20 – Y mataras el carnero, y tomaras de su sangre y la pondrás sobre el lóbulo de la oreja derecha de Aarón, y sobre el lóbulo de la oreja derecha de sus hijos, y sobre el pulgar de su mano derecha, y sobre el pulgar de su pie derecho, y rociaras el resto de la sangre en el altar por todos los lados.

Lo que acabamos de leer se refiere a la consagración para el servicio sacerdotal de Aarón y sus hijos. aquí notamos que el tratamiento para la consagración, la separación del pecado separación para Dios, comenzaba con el lóbulo de la oreja derecha lo cual para nosotros viene a significar la consagración del oír; luego el pulgar de la mano derecha, lo cual representa el obrar, y el pulgar del pie derecho que representaba en andar. Es decir que hay una cadena que se rompería en el caso que un eslabón se perdiera. No podíamos andar en el Camino, si primero no somos oidores y hacedores de la Palabra. Es por tal razón que el SEÑOR revoco el juicio del apóstol Pedro cuando con su espada le corto la oreja derecha a Malco, el siervo del sumo sacerdote: (Juan 18:10,11). Pedro estaba quitándole toda esperanza de consagración, pero sin embargo Jesús le estaba devolviendo todas las posibilidades de consagración, desde aquel entonces solamente dependió de el. No puede ministrar aquel que oye la palabra (lóbulo de la oreja derecha) pero no es hacedor de ella (pulgar de la mano derecha) Santiago 1:22,25 dice que los tales que no sean hacedores de la palabra que oyeron no pueden ser bienaventurados. La falta de los pulgares del pie indican desequilibrio. Por tal razón muchos en su andar no tienen un justo equilibrio y se van de un extremo a otro, en algunas cosas legalistas al extremo, mientras que en otras son totalmente libertinos.

La palabra que se traduce pulgar es: ‘ bohen’, cuyo significado es ‘cerrar y cubrir’, es decir que aquellos que no tienen el pulgar derecho no solo están incapacitados para consagrarse, sino también para servir y no reconocen ‘ cobertura’. La ausencia del pulgar impide cerrar la mano, pues es quien da firmeza sobre todo para tomar la espada. El tal que tenga semejante carencia tampoco tiene autoridad para llevar la Espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios.

Cada dedo de la mano representa a uno de los cinco ministerios: el pulgar, tipifica al apóstol, es el que cubre a los otros ministerios; el índice, al profeta, pues es el que indica acontecimientos; el que sigue es llamado el dedo corazón, este tipifica al evangelista, el cual es responsable de llegar a los corazones endurecidos por el pecado para que acepten el amor de Dios: trasladan el mensaje de amor del corazón de Dios a la dureza del corazón del pecador pasando incluso por su propio corazón, de corazón a corazón; luego esta el anular, este es el dedo de la alianza, tipificando al ministerio pastoral, que es el que lleva al hombre a un compromiso real con Dios; y por ultimo esta el meñique, que es el dedo mas pequeño, el que puede meterse en todos lados, el que destapa los oídos, tipificando al maestro, que quita toda suciedad para que la palabra pueda entrar y guardarse.

Todos estos casos que hemos detallado mas arriba, son los que no pueden ministrar a menos que sean ellos mismos ministrados, pues nuestra oración debe ser como la del salmista: Me desecharas para siempre? Lo cierto es que grande es la misericordia de Dios. Esto significa que todavía hay oportunidad para aquel que se arrepiente.

Beneficios de la imposición de manos:



  1. Se recibe el Espíritu Santo (Hechos 8:17)



  2. Se reciben dones espirituales (1 Timoteo 4:14)



  3. Se recibe sanidad (Marcos 16:18)



  4. Se recibe bendición (Génesis 48:14-22)



  5. Se recibe autoridad delegada (Deuteronomio 34:9)



  6. Se realizan milagros extraordinarios (Hechos 19:11)



  7. Se recibe unción para el servicio (Hechos 6:1-6)


Es necesario entender que el poder no esta en las manos de los ministros sino en Dios, aquellos que no comprenda esta realidad caerán en un culto a la mano tal como hizo Absalon:

2 Samuel 18:18 – En vida, Absalon había tomado y erigido para si una mano (traducido comúnmente como columna) que esta en el Valle del Rey, pues se había dicho: No tengo hijo para perpetuar mi nombre. Y llamo la mano por su propio nombre, y hasta hoy día se llama Mano de Absalon.