La belleza que agrada a Dios
Hechos 9:36-43
Introducción
¿Sabe usted que se necesita para ser elegida la mujer más hermosa del mundo?
La actual miss mundo La peruana, MARIA JULIA MANTILLA, dice que para ser elegida miss mundo, tuvo que someterse a una serie de disciplinas drásticas que le hicieron cambiar su estilo de vida. (Cinco días a la semana, dos horas de ejercicios en un gimnasio, una hora de natación, una hora de sauna) (1 día a la semana visita del estilista) (Una dieta de alimentos estricta eliminando la grasa)
Cuando hablamos de belleza, el mundo tiene sus parámetros para medir la belleza, muy distintos a los de Dios.
Probablemente usted en más de alguna ocasión ha sentido la presión del mundo, se ha sentido mal por que no tiene ciertas características que la sociedad y la televisión exigen. Yo quiero decirle en esta tarde que aunque el mundo tiene una manera de medir la belleza de una mujer, Dios busca mujeres hermosas de otra manera.
La Biblia nos dice en varios pasajes que Dios no se complace en lo externo, sino que él se agrada de la belleza del corazón.
1 Samuel 16:7
Pero Jehová respondió a Samuel: — No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre, pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón.
Transición: Hay una historia en el libro de los hechos que nos enseña quién es una persona hermosa para Dios. Busquemos Hechos 9:36-43
Lectura Hechos 9:36-43
Contexto
Esta historia es una historia muy interesante. Lucas el escritor del libro de los hechos la escribe para que nosotros aprendamos quien es una persona hermosa. La historia se desarrolla en Jerusalén cuando Jesús ya no estaba en la tierra. El había fundado su iglesia. El personaje central de esta historia vivió en una época donde también el mundo valoraba tremendamente la belleza física. Dicen los historiadores que las mujeres gastaban dinero para obtener fragancias, aceites, vestidos de seda, y adornos de oro para lucir hermosas.
Aplicación:
El tiempo no ha cambiado, hoy de igual manera la mayoría de las personas buscan como parecer hermosas ante los ojos de los demás. (Nunca antes se le había dado tanto culto al cuerpo, los anuncios de televisión, los centros comerciales bombardean diciéndonos que para ser una persona hermosa debemos ponernos tal marca). Sabe usted que se da el caso en que creyentes se endeudan y se meten en problemas económicos por comprar ropa y accesorios de belleza. Y querido amigo probablemente este sea una palabra que Dios quiere darte a ti, que sin haberte dado cuenta has comenzado a caminar como el mundo camina, has comenzado a amoldarte a lo que el mundo dicta. Recuerda lo que el apóstol Pablo le dijo a aquellas personas: No os conforméis a este siglo….
La época de la historia es una época parecida a la de ahora, una época en la que debemos recordar cuál es la belleza que Dios busca.
El personaje central de la historia es una mujer que se llamaba Tabita, ¿que extraño nombre, no? ¿Conoce usted a alguien que se llame TABITA? Probablemente no. ese era su nombre arameo, pero su nombre griego es Dorcas. Ese nombre significaba “Gacela” El ser de hermosa apariencia. La gacela era admirada en aquellos tiempos por su belleza. Que interesante el nombre de esta mujer anunciaba que ella era una persona bella. Veremos que efectivamente esta mujer era una mujer de hermosa apariencia. No se dice cuantos años tenía esta mujer, probablemente tenía su edad, cincuenta, cuarenta, treinta. No se sabe, pero lo cierto es que esta mujer un día enfermo y murió. Dice la historia que la mujer luego que había sido lavada y preparada para velarla, la pusieron en una sala y que fueron a buscar al apóstol Pedro quien hizo un milagro y la resucito.
Transición: Esta Historia nos da tres ingredientes para ser una persona hermosa a los ojos de Dios… en primer lugar…
I. PARA SER UNA PERSONA HERMOSA DEBO DE SER DISCÍPULO
Dice el versículo 36 que había en Jope una discípula, que interesante como Lucas identifica a esta mujer, no dice había una costurera, había una comerciante, había una doctora, había una licenciada, había una abogada, dice: Había una discípula.
Dios espera ver mujeres que son hermosas no por lo que tienen, ni por lo que hacen, ni por lo que visten. Sino por lo que son. Discípulas.
Hermanas que difícil es hoy en nuestros tiempos encontrar discípulas de Cristo. Podemos encontrar asistentes a las iglesias, pero no discípulas. Podemos encontrar buenas mujeres en las iglesias, pero no discípulas. Podemos encontrar maestras en las iglesias, pero no discípulas.
¿Sabe por qué? Porque ahora se le ha dado importancia al saber, al tener, y al hacer antes que el ser. Por eso es que encontramos muchas personas con título en la iglesia, pero que se olvidaron en algún momento que antes del hacer ellos son discípulos. Han sido declarados discípulos pero que esa declaración no les da la autoridad de sentarse en la banqueta y ser espectadores de la vida cristiana.
¿Quién es una discípula según la Biblia?
• Una discípula es una fiel seguidora y hacedora de la voluntad de Dios.
• Es alguien que lee la palabra a diario, no de vez en cuando.
• Es alguien que habla con su maestro a diario, no de vez en cuando.
• Es alguien que sigue a su maestro a pesar de lo que venga.
• Es alguien que permite a otro que forme su vida.
El problema es que ahora es difícil encontrar a creyentes que le permitan a otro señalar los cambios y ajustes que debe de hacer.
Dice la escritura que en cierta ocasión los discípulos cuando Jesús les estaba señalando las cosas que tenían que cambiar en sus vidas, muchos se fueron y ya no le seguían, y Jesús se acerco a los doce y les dijo: ¿Quieren ustedes irse también? Una discípula es aquella que esta dispuesta a cambiar su mal carácter, a cambiar su manera de hablar, a cambiar su manera de actuar con su esposo, con sus hijos, con los hermanos.
Hay algunas mujeres que son fieles en venir a la iglesia, fieles en servir a un ministerio, fieles en ofrendar, fieles a entrar al culto, pero que no obedecen a Cristo, cuando Cristo les señala un cambio que tienen que hacer.
Ilustración:
Conocí a una mujer que era una excelente maestra en una iglesia, pero que vez tras vez Dios le había indicado por la palabra y por sus pastores que tenía que cambiar su manera de respetar a su esposo, pero nunca lo hacía. Estoy segura que Dios no se agrada de una mujer así, puede ser bella por fuera, pero por dentro reprueba la prueba, porque no es discípula de Cristo.
Aplicación:
Hermana, ¿Eres tú discípula de Cristo? Si eres discípula de Cristo, tu sigues a tu maestro a pesar de lo que venga; si eres discípula de Cristo, dedicas tiempo a estar con tu maestro a diario; si eres discípula de Cristo, le obedeces cuando te indica un cambio de actitud o de conducta que debes hacer. Si eres discípula, entonces eres una mujer hermosa para Dios.
Transición: El segundo ingrediente para ser una persona hermosa a los ojos de Dios es…
II. PARA SER UNA PERSONA HERMOSA DEBO HACER DISCÍPULOS
El versículo 39 dice que cuando Pedro llegó encontró un grupo de mujeres que le rodearon.
Hay dos palabras interesantes en el versículo. La primera es la palabra “llorando” Lo primero que estas mujeres muestran son sus lágrimas. No eran mujeres contratadas para llorar, ellas lloraban porque una parte de sus vidas había sido quitada. Ellas eran seguidoras de la difunta, eran personas que habían sido formadas por la manera de vivir espiritual de esta mujer. En otras palabras esas personas era discípulas de Dorcas. Que bien había entendido esta mujer el mandato de nuestro Señor Jesucristo: Vayan y hagan discípulos de Cristo. Es natural que alguien que es discípulo de Cristo esté reproduciéndose en otro.
Aplicación:
Es inconcebible que nos pasemos la vida siendo espectadores de cómo otros traen a los inconversos a Cristo y como les discipulan. Por ahí se ha pensado que el discípular a otros es solamente para un grupo de la iglesia, o es solamente para aquellas personas que han pasado los cuatro cursos y el nivel avanzado de discípulado. Quien dijo que el discípulado es una serie de cursos, de donde salio semejante idea que el discípulado no es para todos los creyentes.
También ahora hemos creído que el discípular a otra persona es darle una clase, donde el maestro da la lección y el alumno escucha la lección. Pero se terminó la clase y ya no hay interés de parte del maestro. Gracias a Dios por los maestros que nos han informado, pero gloria a Dios por los maestros que nos han formado, por aquellos que se salieron de su escritorio y que afectaron la vida intima, con preguntas, con oraciones, con ministración, con sus vidas.
Ilustración:
Creo que hay escasez de discípulos porque hemos reducido el discipulado a un libro, a una serie de preguntas que hay que contestar, olvidándonos de lo más importante, del tiempo para la transferencia de vida, el tiempo para ministrar las necesidades de los discípulos.
Ilustración:
Quiero contarles el caso de “Silvia”…..
Hermanos, Necesitamos redescubrir la manera en que Jesús enseñaba.
Dorcas había entendido que es natural que un creyente se reproduzca en otro, y también había entendido que el discipulado es una transferencia de vida.
Transición: El tercer ingrediente para ser una persona hermosa es…
III. PARA SER UNA PERSONA HERMOSA DEBO DE ADORNARME DE BUENAS OBRAS
La segunda palabra interesante del versículo 39 es “mostrando” dice que lo que ellas mostraban eran las túnica y los vestidos que Dorcas hacia cuando estaba con ellas. En otras palabras ellas estaban luciendo lo que ellas les habían regalado.
No hay duda que las mujeres discípulas de Dorcas tenían una tremenda necesidad física, eran viudas.
Lo que Dorcas hacia era hacer viva su fe. Ella entregaba lo que tenía a las necesitadas. Recuerde lo que Santiago escribió.
Santiago 2:14-16
Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarlo? Y si un hermano o una hermana están desnudos y tienen necesidad del mantenimiento de cada día, y alguno de vosotros les dice: “Id en paz, calentaos y saciaos”, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha? Así también la fe, si no tiene obras, está completamente muerta.
Con que frecuencia ahora estamos centrados en nuestras propias necesidades y no vemos con el corazón al necesitado. Cuanto necesitamos recordar que una persona hermosa es aquella que se adorna de buenas obras y no tanto por lo que tiene. Se recuerda de aquel pasaje en Juan 6, en el milagro de la alimentación de panes y peces, que dice que Jesús levantando los ojos vio a la multitud y tuvo compasión. Nosotros muchas veces no levantamos los ojos, no vemos la necesidad del otro, estamos centrados en nuestras necesidades.
Nos parecemos mucho al gigante egoísta del cuento de Oscar Wilde. Los discípulos de Jesús aprendieron a desprenderse de lo que tenían para llenar las necesidades de los otros.
¿Cómo estas tú? Te adornas de buenas obras, te conocen por una persona que se fija y llena las necesidades del otro o te conocen como una persona que habla bonito, que canta lindo, pero que cierra su compasión hacia el necesitado.
Conclusión:
Mi hermano, recuerda para el mundo puede ser que seas hermoso, porque tienes bonita figura, bonito nombre, prestigioso apellido, buen sueldo, linda casa, pero para Dios la hermosura se encuentra en el corazón.
Dorcas nos ha dado tres lecciones de quién es una persona hermosa.
¿Qué harás tú ahora?