La autoridad del creyente

La autoridad del creyente


Parte II

El razonamiento: Una Obra de la Carne.

Gálatas 5:16; Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no cumpliréis el deseo de la carne.

Este versículo que para muchos es conocido, nos da una revelación tremenda de parte del Espíritu santo en cuanto a nuestro caminar en autoridad. Entendiendo que caminar en el espíritu o caminar en la carne, es una manera de pensar; Caminar en la carne no es solo tener un cuerpo e ir caminando por el mundo; Es entender que tú tienes un centro procesador de pensamientos y ese es tu mente.

Romanos 8:5; Porque los que viven conforme a la carne, ponen la mente en las cosas de la carne, pero los que viven conforme al Espíritu, en las cosas del Espíritu.

Cuando pensamos en caminar en la carne pensamos en fornicación, adulterio, matar, robar etc. Pero estas cosas son solo las obras de caminar o de tener un amanera reprobada de pensar, lejos de la mente o de los pensamientos de Dios. Porque para fornicar, tú tienes que pensarlo primero, y para adulterar tú tienes que hacerlo primero en tu mente.

Ahora de la manera que quiero que enfoques la diferencia entre caminar en el Espíritu y caminar en la carne es el punto de vista de donde tu te estés enfocando.

Cuando tu enfocas tu caminar bajo el punto de vista de Dios, empiezas a caminar en el espíritu, pero si por el contrario enfocas tu caminar o tu manera de pensar de acuerdo al hombre (o a este siglo) caminarás en la carne.

Controlando tu mente, controlaras tu destino

Ahora te podrás preguntar:

¿Cómo hago para ver las cosas bajo el punto de vista de Dios?

Ver las cosas a través de Su Palabra. Cuando veo o enfoco mi caminar a través de la Palabra de Dios, estoy haciendo las cosas bajo el punto de vista de Dios.

El hombre común, camina de acuerdo a su sistema sensorial: vista, oído, tacto, etc. Ve, oye y siente solo lo que esta en frente de él, lo que es real, y esa es la carne. Pero el hombre que camina en el Espíritu no tiene que ver las cosas ni oírlas ni sentirlas, solo las ve a través de la Palabra, y eso es ver las cosas a través del punto de vista de Dios.

La carne esta de acuerdo con todo lo que se oponga a La Palabra de Dios.

La carne opera a través de razonamientos.

En estos tiempos, la Iglesia de Jesucristo (Tú y Yo), a estado perdiendo el tiempo en razonamientos, cuestionando, pensando demasiado la Palabra de Dios. Si Dios dice que por su yaga fuimos sanado, empezamos a razonarlo, a cuestionarlo, a pensar demasiado y de esta manera abolimos o anulamos la autoridad de la Palabra.

Una cosa es preguntar a Dios sobre algo, como Maria le preguntó al Ángel ¿Cómo seria esto? Pus no conozco varón. (Lucas 1:34), o cuestionar a Dios y decir: Si Dios dice que por su yaga ya fuimos sanados, como es que fulano se murió. Cuestionamos si esto es legitimo o no. Eso es incredulidad, lo cual te lleva a invalidar la autoridad de la Palabra.

Lucas 5:20-23; Viendo Jesús la fe de ellos, dijo: Hombre, tus pecados te son perdonados. 21 Entonces los escribas y fariseos comenzaron a discurrir, (cuestionando, discutiendo y preguntando) diciendo: ¿Quién es éste que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados, sino sólo Dios? 22 Conociendo Jesús sus pensamientos, respondió y les dijo: ¿Por qué discurrís en vuestros corazones? 23 ¿Qué es más fácil, decir: “Tus pecados te son perdonados”, o decir: “Levántate y anda”?

Estos escribas no querían hacer una legítima pregunta acerca de quien era Jesús, a la cual creo que Jesús hubiera estado más que dispuesto a contestársela, pero en cambio, ellos empezaron a cuestionar la autoridad. En realidad creo que ellos por no querer cambiar su manera de caminar en el farisaísmo cuestionaron la autoridad de Jesús.

Razono y cuestiono porque no creo

Mateo 13:53-58; Y sucedió que cuando Jesús terminó estas parábolas, se fue de allí. 54 Y llegando a su pueblo, les enseñaba en su sinagoga, de tal manera que se maravillaban y decían: ¿Dónde obtuvo éste esta sabiduría y estos poderes milagrosos? 55 ¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, y sus hermanos Jacobo, José, Simón y Judas? 56 ¿No están todas sus hermanas con nosotros? ¿Dónde, pues, obtuvo éste todas estas cosas? 57 Y se escandalizaban (se ofendieron) a causa de El. Pero Jesús les dijo: No hay profeta sin honra, sino en su propia tierra y en su casa. 58 Y no hizo muchos milagros allí a causa de la incredulidad de ellos.

Fíjense que ellos empezaron a cuestionar de donde tenia este tanta autoridad, Si el estaba hace rato corriendo como un niño por aquí, (y no por que se maravillaron) Este no se supone que tenga esta clase de poder, unción y sabiduría. Cada vez que empezamos a cuestionar la autoridad delegada por Dios a Su Iglesia, nuestra mente nos lleva a la incredulidad y al final a la ofensa.

Cuestionando la Palabra de Dios, tratamos de probar que la escritura esta equivocada para que no tengamos que cambiar.

¿Qué de malo tiene el tener relaciones antes de casarme?

¿Por qué debo diezmar si Dios sabe que no tengo dinero?

Porque no deseas cambiar

La carne, el razonamiento y la pregunta te llevaran a la incredulidad

Mateo 11:2-3; Y al oír Juan en la cárcel de las obras de Cristo, mandó por medio de sus discípulos 3 a decirle: ¿Eres tú el que ha de venir, o esperaremos a otro?

¿Está Juan preguntando o cuestionando?

Como es que Juan el Bautista hace este tipo de pregunta, si él mismo bautizo a Jesús y oyó la voz de Dios que decía “este es mi hijo amado” . Creo que Juan no hizo esta pregunta para saber si era o no Jesús, hizo la pregunta porque había incredulidad en su corazón, porque si este es realmente Jesús ¿por qué estoy aun en la cárcel? ¿Por qué si este es realmente Jesús, no tengo un mejor trabajo? ¿Si este es realmente el Jesús que tiene poder ¿Por qué no tengo mas dinero? ¿Por qué me hizo casar con este hombre que me vuelve loca?

Mateo 11:4-6; Y respondiendo Jesús, les dijo: Id, y contad a Juan lo que oís y veis: 5 los CIEGOS RECIBEN LA VISTA y los cojos andan, los leprosos quedan limpios, los sordos oyen, los muertos son resucitados y a los POBRES SE LES ANUNCIA EL EVANGELIO. 6 Y bienaventurado es el que no se escandaliza de mí.

La incredulidad en forma de cuestionamiento de la Palabra dirigirá al hombre a la ofensa, porque el cuestionar y razonar te llevan a caminar en incredulidad.

En ves de preguntarle a Dios ¿Por qué estamos como estamos y no mejoramos? Deberíamos preguntarnos a nosotros mismos. Creo que cada uno de nosotros pudiera contestar esa pregunta por si solo.

Cuando no sabemos algo de parte de Dios, lo mejor que podemos decir es: “Gracias Jesús”. Pero no caigamos en la incredulidad y luego terminamos ofendidos con Dios.

Dios no esta interesado en ser cuestionado sino creído.

Nada puede bendecir o agradar más a un padre que sus hijos crean su palabra sin cuestionarla, dudar de ella o tener que probarla, pero en algunos casos necesitamos experiencias para creer. Y le decimos a Dios, muéstrate, necesito una experiencia cercana del tercer tipo para cree, Y Dios no trabaja de esa manera.

Cuando tu estas caminando en el Espíritu, prepárate para el poder

Ahora vamos a ver la misma situación de dos hombres en prisión, pero tratada de diferenta manera:

Hechos 16:23-25; Y después de darles muchos azotes, los echaron en la cárcel, ordenando al carcelero que los guardara con seguridad; 24 el cual, habiendo recibido esa orden, los echó en el calabozo interior y les aseguró los pies en el cepo. 25 Como a medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, y los presos los escuchaban.

En ves de ellos estar cuestionando, razonando y ofendidos por estar en la cárcel, empezaron a dar gracias y a cantar. Cuando en tu vida lleguen situaciones que tú no entiendes, no las razones ni las cuestiones, cántale, ora y dale gracias a Dios. Ver 26; “De repente” se produjo un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel fueron sacudidos; al instante se abrieron todas las puertas y las cadenas de todos se soltaron.

Cuando la gente te ve en situaciones desesperadas y sin esperanzas y te ven cantando, orando y dando gracias en vez de murmurar y quejarte verán tu liberación. No cuestiones a Dios en tu incredulidad. Glorifica a Dios, dale gracias, ora (en lenguas) y Él traerá tu victoria a través de la autoridad que delego en ti y declarada con tu boca. Declara solo para victoria. Hay cuatro cosas que estorban al hombre el caminar en el Espíritu y ver las cosas bajo la perspectiva de Dios:

Proverbios 23:7; pues como piensa el hombre dentro (en su corazón) de sí, así es.

1. Las circunstancias actuales. (Reporte médico, tu chequera, personas)

2. Tus experiencias pasadas. (Siempre me pasa lo mismo, divorciada,)

3. Experiencias ajenas. (No te limites por la experiencia ajena)

4. Limitaciones declaradas a tu vida. (Si yo no pude tú tampoco)

Génesis 12:1-3; Y el SEÑOR dijo a Abram: Vete de tu tierra, de entre tus parientes y de la casa de tu padre, a la tierra que yo te mostraré. 2 Haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3 Bendeciré a los que te bendigan, y al que te maldiga, maldeciré. Y en ti serán benditas todas las familias de la tierra.

Si no puedes cambiar tu manera de pensar No habrá dios que te ayude;

Cambia tu manera de pensar y cambiaras tu destino.

La autoridad del creyente

La autoridad del creyente


Parte I

2 Corintios 10:4-5; porque las armas de nuestra contienda no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas; 5 destruyendo especulaciones, imagines, dudas y todo razonamiento altivo que se levanta contra el conocimiento de Dios, y poniendo todo pensamiento en cautiverio a la obediencia de Cristo,

Toda esta serie de enseñanzas acerca de la autoridad tiene como fin, que el creyente conozca su posición ante el mundo espiritual y la autoridad que ha sido delegada por Dios a su Iglesia para operar en este planeta.

Pasamos tiempo orando y creyendo en el poder de la oración, pero llega el momento en que nosotros debemos conocer como hacer demandas al mundo espiritual, Jesús esta en el cielo y tu y yo estamos aquí en la tierra y si no aprendemos ejercitar nuestra autoridad y hacer las demandas que debemos, nadie las ara por nosotros.

Si no demandamos nada, nada pasa.

Muchas veces cuando deberíamos estar demandando que ocurran las cosas que necesitamos o queremos en el nombre de Jesús, nos mantenemos aun pidiendo y esperando, sin tomar la autoridad que nos ha sido entregada ya.

Entiende que tú y Yo, somos como hijos de Dios la autoridad sobre la tierra, de manera que lo fue Jesús cuando estuvo en carne entre nosotros. Y al final terminamos derrotados, enfermos y como siempre buscando una excusa para justificar que aquello que pedimos en oración no ha llegado todavía.

Controlando tu mente, controlaras tu destino

Sabemos que la vida del hombre es la suma total de la manera como él piensa, así que si tus pensamientos están alineados con la Palabra de Dios tu destino estará alineado con la Palabra de Dios.

De acuerdo al pasaje que leímos al principio, entendemos que el cristiano se encuentra en medio de una batalla (y no me refiero a la de Irak) aquí en la tierra, sino espiritual, y Dios no nos ha dado armas convencionales como un fusil, granadas cañones, etc. Sino armas espirituales, armas que se encuentran en la Palabra de Dios, las cuales podemos sacar para destruir esa fortaleza (oposición) que se ha levantado contra mí. ¿Qué son las fortalezas?

Las fortalezas no son otra cosa que pensamientos bien fortificados y alimentados que residen en la mente del hombre. Es decir, un pensamiento que llego a mi mente a través de una palabra que oí de alguien, al cual lo he empezado a acariciar, alimentar, fortificar y mantenido en mi mente por tanto tiempo que llegamos a pensar que no hay otra manera de pensar o hacer las cosas. Si creces pensando de una manera y nadie te indica que hay otra manera de pensar o ver las cosas, tu has fortificado ese pensamiento (en la mayoría de las veces equivocado) por años y crees que esa es la manera correcta de pensar.

Por un momento regresa al día que te convertiste al cristianismo y aceptaste a Jesús como tu Salvador y abriste la Palabra de Dios y encontraste cosas que iban en contra de los pensamientos (en su mayoría) que tenías. Contradecían todo lo que tú creías como debían ser las cosas. Ahora haciendo la Escritura (La Biblia) nuestra autoridad final, podemos destruir toda fortaleza (pensamientos equivocados) que se levantan contra el conocimiento de la verdad. Juan 8:32.

Las Fortalezas pueden ser: Orgullo, tristeza, depresión, temor, incredulidad, división, falta de amor, incomprensión, infelicidad, baja auto-estima, murmuración, chisme, Fornicación, adulterio, mentira, celo ministerial, duda, falta de perdón. Y muchas otras cosas más.

Dios aclara que nuestras armas (Su Palabra) son poderosas para destruir estas fortalezas. No hay nada que podamos decir que haga cambiar la mente de un homosexual, solo la Palabra de Dios puede cambiar o destruir esa fortaleza y liberar aquella mente del cautiverio del homosexualismo.

La Palabra de Dios corregirá hábitos corruptos de pensamientos

2 Timoteo 1:7; Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.

No hay temor en mi vida

Marcos 7: 20-23; Pero decía: Lo que sale del hombre, eso es lo que contamina al hombre. 21 Porque de adentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, fornicaciones, robos, homicidios, adulterios, 22 avaricias, maldades, engaños, sensualidad, envidia, calumnia, orgullo e insensatez. 23 Todas estas maldades de adentro salen, y contaminan al hombre.

Si Satanás va a tratar de alejarte de todo lo que es vital para tu vida cristiana, lo hará contaminando tus pensamientos.

Temor es fe corrompida

¿Cómo destruimos una fortaleza?

Josué 1:8; Este libro de la ley (La Palabra de Dios) no se apartará de tu boca, sino que meditarás en él día y noche, para que cuides de hacer todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino y tendrás éxito.

Proverbios 13:20; El que anda con sabios será sabio, mas el compañero de los necios sufrirá daño.

A través de estos dos pasajes, Dios nos regala dos tremendas armas para destruir cualquier fortaleza que este en nuestra mente:

1) Meditar en la Palabra de Dios, alinear tus pensamientos con los pensamientos de Dios, y cuando te hayas alineado con Sus pensamientos, prosperaras y tendrás éxito.

2) Reúnete con gente sabia en la Palabra, no en sus propias opiniones.

Romanos 12:2; Y no os adaptéis a este mundo, sino transformaos mediante la renovación de vuestra mente, para que verifiquéis cuál es la voluntad de Dios: lo que es bueno, aceptable y perfecto.

Te voy a decir cuatro maneras como puedes alimentar tu mente correctamente:

1) Lee la Biblia.
2) Permítete el tiempo para escuchar a Dios hablarte a través de Ella.
3) Estudia la Palabra.
4) Usa tu imaginación.

El diablo sabe que nuestro campo de batalla se encuentra en nuestra mente, y es ahí donde él tratara de destruirte.

Marcos 3:13-15; Dice que Jesús llamo a los que Él quiso y vinieron a Él ¿a cuantos ha llamado el señor? Y ¿Cuántos vinieron a Él? Dice mas: Y Estableció a Doce, esta palabra Estableció significa: instalar, Iniciar, colocar, asentar, fundar, instaurar, y los estableció Para que estuvieran con el, ¿para que? Para enseñarles, en otras palabras para prepararlos, ya que no tan solo se iban a enfrentar a sus problemas personales solamente, sino que también a fuerzas Espirituales de maldad en las regiones celestes, El señor Preparo a sus apóstoles para lo espiritual y lo sobrenatural, después de prepararlos dice que los enviaría a predicar El Versículos 15 dice y les dio Autoridad para sanar Enfermedades y echar fuera a los demonios.

Lucas 10:17-19; Los setenta “regresaron con gozo”, diciendo: Señor, hasta los demonios se nos sujetan en tu nombre (en Griego: Tu Autoridad). 18 Y El les dijo: Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo. 19 Mirad, os he dado autoridad para hollar sobre serpientes y escorpiones, y sobre todo el poder del enemigo, y nada os hará daño.

La autoridad ya ha sido delegada por Jesús a Su Iglesia (Tú y Yo) para tomarla y hacer lo que debemos hacer. ¿Alguien debe hacerlo?. Y aun los demonios se sujetaran a tu autoridad en Su nombre.

Dios nos ha dado la autoridad, el poder, el dominio contra toda fuerza o habilidad del enemigo, y nada puede dañarte, no debemos estar asustados de destruir fortalezas, ni ataduras que el enemigo tenga sobre nosotros o sobre otros.

El valor de tu autoridad descansa en el Poder (Dios) que hay detrás de esa autoridad. El creyente que duda que Dios es el que respalda su autoridad, condena de antemano el uso de la autoridad y enfrenta al enemigo con miedo.

¿Qué es autoridad?

“Es Poder delegado por Dios”.

La palabra Autoridad significa: Mando, Poder, Dominio, Potestad, Prestigio, Crédito, Legitimidad, Influencia, Autoridad también tiene que ver con tu testimonio, Tu Testimonio representa tu autoridad, cuanto mejor testimonio tengas mayor autoridad tendrás en Marcos 3:11-12 dice: que los espíritus Inmundos al ver al señor Jesucristo, salían estos dando grandes voces, tan solo ver al señor salían.

Un policía vestido con su uniforme, levanta la mano y el vehículo que viene hacia él, se detiene. Ahora, el policía en su fuerza natural o humana no puede detener un vehículo que viene a 40 millas por hora, pero la autoridad con la cual esta envestido por la Ciudad o el Gobierno le ha dado el poder para detener ese vehículo.

Yo no tengo el poder en mis fuerzas naturales para reprender a ningún demonio y menos a Satanás, pero ahora poseo el uniforme, la autoridad delegada, envestido por Jesús a través del Espíritu Santo, para que en el nombre de Jesús, tome autoridad sobre toda circunstancia o situación.

Efesios 6:10-13;

Filipenses 4:19;

Efesios 1:17-23 / 2:1-7;

Declara conmigo:

“Yo tengo autoridad en el nombre de Jesús sobre serpientes y escorpiones, sobre cada principado y potestad, demonios, gobernadores de las tinieblas, huestes espirituales de maldad, contra enfermedades. Yo tengo la autoridad y el poder en el nombre de Jesús”. Amen.

Destruyamos esa fortaleza que nos ha estado diciendo que solo Jesús, es el que tiene el poder para hacer milagros o esto o aquello. Por supuesto que debo estar en El para tener esa autoridad.

Juan14:12; De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que Yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque Yo voy al Padre.

Camina de hoy en adelante en la autoridad que Jesús te ha delegado.

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