Herederos en el tiempo exacto

Herederos en el tiempo exacto


Lucas 15:11-32


Este mensaje que cuenta la historia de un hijo que en determinado momento por razones no descriptas en la narración pide a su padre que le diera su parte de herencia que en ley le correspondía y más sabiendo que el padre era rico y que no se lo negaría. Ahora esto es usado en general como mensaje evangelístico pero en esta oportunidad, el Señor nos llama a la reflexión para entender el propósito de Dios sobre nuestras vidas.


En muchas oportunidades, al pedir a Dios algo (Material, Espiritual, Sentimental, etc.) no obtenemos respuesta alguna, y es ahí en donde ideas como que no nos responde o que hemos sido olvidado reflotan en nuestros corazones. Pero Dios nunca abandona a sus hijos, el problema es que pedimos en forma incorrecta y fuera de su voluntad (Santiago 4:3). Dios no se debe adaptar a nuestros gustos o antojos sino que debemos entender que es Dios quien controla y maneja nuestros Tiempos.


Viendo el ejemplo se destaca tres personajes que marcan características de nosotros para con Dios y de Dios para con nosotros: Hijo Prodigo: pidió lo que le correspondía pero fue en el tiempo que él creyó justo. Esto generó lo siguiente: Administró en forma incorrecta, alimentando a cientos de falsos “amigos” en derroches y vanidades superficiales. Al alejarse de su padre, perdió la “Cobertura” que tenía por parte del que le había dado vida, criado, educado y quien estaba preparando todo para cuando fuera su tiempo de madures. Esto lo llevó a terminar solo y en la escoria en donde se dio que no solo perdió todo sino que se alimentaba de la basura que le daba a los cerdos y es ahí en donde se acordó que junto a su padre siempre obtuvo lo mejor y que nunca estaría mejor que al lado de su cobertura.


El Padre: Educó a sus hijos en Riqueza, Amor y Cuidados. Siempre respeta la decisión del hijo y nunca deja de esperar la vuelta del que se fue sin que lo echara, sin pasar facturas ni cuentas y cuando el hijo espera el desprecio, restituye su dignidad y le devuelve su lugar que es único y personal. Busca siempre la unión del hogar (Versículo 28)


Hijo Mayor: Aparece este personaje en forma impredecible pero es un enseñanza para los que nunca no alejamos de su cobertura. Ser fiel a Dios, no solo es hacer lo que quiere sino que es amar lo que él ama y buscar lo mismo que el busca. cuando uno de nosotros se aleja o cae en vez de tener actitud del Padre, nos volvemos egoístas y soberbios reclamando lo hecho como si no fuera todo por gracia y regalo del Señor. Que mejor servicio al padre que amarnos los unos a los otros en forma especial, y agradecer a Dios la posibilidad de poder servir al lado del que se había perdido y hoy regresa al regazo del padre.


Reflexión final:


Seamos maduros en Dios, si pedimos que sea en el justo tiempo de Dios y en su voluntad (1º Juan 5:14) sabiendo que el supliría nuestras necesidades y que en sus riquezas la herencia es para nosotros. Cuando uno comprende la actitud del padre, sabe que el egoísmo debe ser algo del pasado y no actuar como el hijo mayor que en vez de alegrarnos por su hermano se sintió mal por toda la demostración de amor del padre al pródigo. Actuemos en forma de familia y en el justo tiempo y voluntad de Dios para recibir de lo alto la máxima bendición de nuestras almas.