Hay que estar preparados
Mateo 25:1–13
Introducción:
Han sido miles los que se han atrevido a colocar en un calendario el día y la hora de la venida de nuestro Señor Jesucristo. Todos los que se han atrevido a precisar este día incierto han fallado en sus predicciones, una gran decepción han provocado en todos sus seguidores. Nosotros tenemos en la Biblia el manual mas seguro y preciso de las características, que acompañaran el retorno de nuestro Señor Jesucristo. En el mensaje de este día descubriremos la manera en que muchos están viviendo sin creer que un día tendrán que rendirle cuentas a Dios, aprenderemos además a como vivir preparándonos para este glorioso acontecimiento el cual debe encontrarnos preparados en todo tiempo.
Hay una gran cantidad de pasajes bíblicos, que no necesitan una mayor interpretación, ya que en su contenido son tremendamente específicos y claros, este que hemos leído es uno de ellos. Sin embargo hay muchos elementos que hoy estudiaremos en este pasaje que lo hacen un mensaje único, vivo y vigente.
1. El reino de los cielos es semejante a diez vírgenes.
El numero diez nos habla de un numero completo, esto quiere decir que nos esta hablando de la iglesia como un solo cuerpo, aunque interiormente esta separada, un grupo es llamada “Prudentes” mientras que el otro es llamada “Insensatas.”
Verdades de la Iglesia que Jesucristo viene a recoger:
Su verdadera iglesia es una sola (no denominaciones, sectas o grupos)
Ella se ha preparado
Ella es un valuarte, es luz, es la sal de la tierra
Ella es representante del reino de Dios en este mundo
Ella se santifica y se prepara (no tiene mancha ni arruga en su vestido)
2. La diferencia entre las prudentes y las insensatas.
Cinco de ellas se prepararon tomando aceite extra, la palabra prudente además es traducida como “sensibles,” esto nos enseña que la prudencia va acompañada de sensibilidad espiritual. Cinco de ellas se prepararon de una manera mas esforzada, esto me habla de la cuota de esfuerzo y de valentía que se necesita tener para servir a Dios, poco a poco la iglesia moderna a sacado de su vocabulario algo que en la iglesia primitiva era lo más común cuando de servir a Dios se trataba. El apóstol Pablo habla de que sirviendo a Dios conoció de peligros, persecución, traición, prisiones, vituperios, etc. El gran error de las insensatas fue, no prepararse, tal vez en algún momento del camino se rieron de las que cargaban aceite extra por el camino. Las insensatas representan la liviandad de la iglesia en el ultimo día, la iglesia liviana es la que interpreta lo que ya esta interpretado, la que da a luz doctrinas de conformismo y pasividad espiritual, la que se conforma con las mentiras del mundo y no hace nada para combatirlas.
3. Todas cabecearon y se durmieron.
La iglesia de nuestro Señor Jesucristo nació en fuego, en aquellos días ser cristiano costaba hasta la vida misma, la Biblia dice que el pueblo los miraba con temor y admiración, era muy extraño ver a campesinos, pescadores y gente sencilla hablar y actuar con una autoridad nunca antes vista, ese era el poder de Dios en ellos! Cuando los años pasaron y la iglesia dejo de ser perseguida encerraron a Dios en los templos, (a este tiempo se le llamo el principio del fin y el tiempo de la oscuridad) en aquel tiempo nació la religión y con ella comenzó la época más oscura de la iglesia, grandes crímenes, violaciones y atropellos se cometieron en nombre de Dios y lo más trágico fue que Dios no estaba en ninguno de ellos.
Entre los siglos 18 y 19 un nuevo viento de avivamiento comenzó a soplar por toda la tierra, es difícil precisar donde comenzó todo, pero sabemos de la historia de grandes hombres de Dios que comenzaron a sentir lo que Dios sentía por sus ciudades y países, uno de ellos vio en una visión de Dios como el mapa de Europa ardía en llamas y luego se expandía por todo el mundo, él entendió que Dios lo estaba llamando para llevar el fuego del evangelio por todo el mundo.
4. Se levantaron y se arreglaron.
A media noche se escucho un grito, ¡El esposo viene! todas se levantaron y se arreglaron. El tiempo de levantarse y de arreglarse a llegado !no podemos, no debemos permanecer acostados durmiendo espiritualmente, no podemos prolongar por mas tiempo un adormecimiento espiritual que es sumamente peligroso . Cuando Marco Polo visito por primera vez China quedo asombrado de la grandeza de esta civilización, por tal motivo exclamo “Cuando este gigante se despierte el mundo tendrá de que preocuparse;” lo mismo podemos decir de la iglesia de nuestro Señor Jesucristo, cuando la iglesia se levante, el mundo tendrá de que preocuparse!
Luego de levantarse, la Biblia dice que se arreglaron, este es un llamado de parte de Dios, para arreglar el altar de Dios en la iglesia y en nuestras vidas, por tal motivo les exhorto; arregle su comunión intima con Dios, arregle sus promesas y pactos que un día Ud. Hizo con él, arregle su vida espiritual.
5. Una responsabilidad única y no una responsabilidad compartida.
Dadnos de vuestro aceite ,,,, ( vrs. 8 ) pidieron las insensatas a las prudentes. La salvación y la preparación espiritual es una responsabilidad única y no compartida, no podemos responsabilizar o culpar a otros por lo que tenemos o lo que no tenemos o lo que esta pasando o no pasando en nuestra vida. Es tiempo de asumir nuestras propias responsabilidades, cargar con nuestro propio aceite, entender que la adoración es personal, el crecimiento espiritual es personal, el despertamiento espiritual es personal .
6. El día de las grandes sorpresas y de las grandes decepciones.
Alguien dijo que las bodas del cordero de Dios será conocido además como el día de las grandes sorpresas o las grandes decepciones. Muchos que creíamos con los pasajes ya reservados no llegaran y otros que nunca creímos que ahí estarían allí estarán . La palabra de Dios manda y enseña a prepararnos, la Biblia nos exhorta a santificarnos, despojándonos del viejo hombre, renunciando a todo lo que contamina.
Este pasaje bíblico termina diciendo que debemos velar, esto significa estar siempre preparados y atentos, dispuestos además en cualquier momento a rendirle cuentas a Dios por nuestra vida.