Estos tiempos que vivimos II

Estos tiempos que vivimos II


Colosenses 1:15-23


Introducción


El 16 de abril de este año un total de 33 personas murieron y al menos 30 resultaron heridas en la Universidad Tecnológica de Virginia en una de las peores matanzas de su historia en los Estados Unidos. El primer ataque se registró a las 7:15 en un dormitorio para 900 estudiantes. Cientos de miembros de la comunidad universitaria comenzaron a correr en todas direcciones, y las autoridades no ofrecieron una respuesta inmediata y organizada ante la crisis. Dos horas después del tiroteo en el dormitorio, cuando los agentes de seguridad de la institución aún investigaban los hechos, y suponían que el atacante había huido, comenzó a circular la versión de que otra balacera se había desatado en el edificio Norris, que alberga a la Escuela de Ciencias e Ingeniería, reconocida como una de las 20 mejores en Estados Unidos. Los estudiantes de ingeniería pasaron momentos de angustia cuando confirmaron que estaban atrapados. Sólo hasta el segundo tiroteo, iniciado a las 9:15, los agentes de seguridad universitarios comenzaron a alertar a los estudiantes por altavoces: “Esto es una emergencia… Hay un hombre armado en el campus, manténganse en el interior de los edificios y lejos de las ventanas” El atacante era un estudiante de Corea del Sur identificado como Cho Seung-Hui, de 23 años, vivía con su familia en Estados Unidos desde 1992 y estudiaba letras inglesas en esta institución educativa. Cho Seung-Hui termino suicidándose. Sin embargo mientras muchos se horrorizan de esto ya tan común en los Estados Unidos; tan sólo el mismo día en México el crimen organizado asesino 23 personas; según la estadísticas cada año en nuestro país mueren ejecutados 10,000 personas. Noticias como estas se están volviendo el pan nuestro de cada día Son noticias que caracterizan estos tiempos que vivimos. La semana anterior comentaba que los tiempos que hoy vivimos son tiempos difíciles en donde la idea de un Dios real, absoluto y único es difícil de aceptar. Sin embargo la Biblia nos demuestra que Dios es real, absoluto y único. Así mismo afirmaba que estos tiempos que vivimos hoy no es muy diferente de lo que los cristianos de la población de Colosas habían experimentado. Podemos decir que lo que sucedía en los tiempos de los colosenses; comparte similitudes con estos tiempos que nosotros vivimos. Según los historiadores en los tiempos de los colosenses había una gran inmoralidad sexual, una enorme fascinación por las cuestiones espirituales, especialmente la astrología, la demonología y el culto a los ángeles; por lo tanto había una mezcla de las muchas religiones existentes. La estructura familiar igualmente estaba en desintegración y las funciones dentro de la misma familia era confusa. Estas eran las condiciones bajo las cuales la fe cristiana se desarrollaba en Colosas. Al parecer muy parecida a la nuestra. E igualmente los creyentes en Cristo estaban amenazados en ser contaminados por estas formas de pensar y de actuar. Por esa razón Pablo escribe esta esplendida carta en donde el tema central es decirnos que Cristo es la única y suficiente repuesta; por ser la imagen del Dios verdadero. La semana anterior hable sobre estos tiempos relativos, científicos y ecuménicos y en repuesta a estas realidades la Palabra de Dios nos dice que Jesús es la única respuesta capaz de cambiar estos tiempos que vivimos. En este día terminaré cerrando la idea con tres aspectos de este mundo y su respuesta a la luz de la carta a los Colosenses.


I. Tiempos de Conveniencia (1: 22) “para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de Dios”


Jean Paul Sartre, famoso escritor francés dijo en una ocasión: Todos los medios son buenos cuando son eficaces esta frase no es más que una expresión pura del pragmatismo, filosofía que muchos sin saber practican en todas las áreas de su vida. El pragmatismo es en términos generales usar o creer en algo que me sirva aunque no necesariamente sea bueno o verdadero. Vivimos tiempos de conveniencia, pragmatismo, de utilidad, de si me sirve lo uso, si no me deja utilidad, no lo uso y ni lo creo. Así es como muchos se conducen hoy en día. México es considerado la tercera potencia mundial en piratería; si, somos un país en donde la piratería ya no es vista como buena o mala, sino si es útil o no. El aborto ya no es visto como bueno o como malo, sino más bien como útil o conveniente; De igual manera otras áreas de la vida podemos ver reflejado el pensamiento pragmático; no sé si esta mujer o este hombre me digan la verdad, lo que importa es que me quite la soledad y me de hijos. La fe igualmente se ve involucrada por este pensamiento; hay cientos de miles de personas involucradas en grupos religiosos mentirosos, fraudulentos, falsos, más sin embargo siguen allí, porque les reditúa algún tipo de beneficio; en los cristianos también podríamos encontrar algo así; pues hay quienes se añaden a la iglesia por obtener algún beneficio, no necesariamente porque este convencido de que Jesús sea la verdad. La población de Colosas era una región ubicada en la región de Frigia, provincia romana, en lo que hoy es parte de Turquía en Asía. En esa región se había establecido una iglesia que estaba inmersa en la cultura colosense, mayormente pagana; y en donde de igual manera a nosotros la gente adoptaba formas y creencias, no en base a si eran verdaderas o buenas; sino más bien en si le convenían o no. Por eso el apóstol de la fe, Pablo de manera preventiva escribe a los creyentes de Colosas y les revela que Jesús es Dios mismo (v. 15); pero también les muestra que la fe en Jesús es conveniente; es útil, es verdadera y es transformadora. En primer lugar porque la fe en Cristo Cambia las vidas “para presentaros santos y sin mancha e irreprensible delante de Él” (v. 22) cuando vivimos alejados de Dios somos pecadores confesos y practicantes ante sus ojos; pero al allegarnos a Cristo somos transformados en santos (separados del pecado y apartados para Dios), sin mancha (intachables o sin defecto moral) e irreprensibles (nadie, ni Satanás puede culparnos de nada).


Charlene Cothran fue hasta hace algunos años editora, fundadora de la revista gay: Venus, pero además Charlene había sido apasionada defensora de la comunidad lésbico-Gay afro americanos; por ser ella misma lesbiana; sin embargo sorprendió al mundo con su CAMBIO, pues ahora ha informado su decisión de que su revista Venus será dedicada a ayudar a homosexuales a salir de esta manera de vida ¿Por qué? Se preguntaran algunos, pues porque Charlene ha entregado el control de su vida a Jesucristo; Jesús es verdadero; pero además cambia vidas. En segundo lugar es útil porque satisface totalmente nuestra vida Y vosotros estáis completos en Él (2: 10) ya hemos mencionado que maestros falsos en Colosas buscaban involucrar a los cristianos de aquella localidad en diversos ritos paganos, con la idea de que ellos (los cristianos) completaran su vida espiritual; es decir decían que debían relacionarse con ángeles u otras entidades espirituales para poder acercarse a Dios. Negaban que Jesús era Dios; pero también creían que no era suficiente creer en Cristo para acercarse a Dios; por esa razón Pablo de manera categórica y firme dice En Jesucristo, ustedes están completos Una mujer llamada Christina Grof escribió un libro titulado Sed de plenitud en él dice que los seres humanos nacen con una necesidad muy grande de ser plenos, es decir de sentirse completos, llenos, felices en todas las áreas de su vida; pero que al no hallar esto en lo cotidiano, empiezan un peregrinar que puede llevarlos a experimentar muchas cosas tanto buenas como perjudiciales. Y tiene razón, la persona sin Cristo esta incompleta y trata de llenarse emprendiendo una búsqueda que bien puede perderlo o hacerlo encontrar su propósito en esta vida. Este problema es tan antiguo como la humanidad misma; por eso Pablo dijo y sigue diciendo: En Jesús, ustedes están completos, saciados, llenos, saciados, pletóricos, etc. En la versión del N.T. este mismo versículo de traduce así: “En Cristo, ustedes están completos y no necesitan nada más pues él esta por encima de todos” (v. 10) ¿Porque usted siendo cristiano no bebe hasta caerse de borracho? ¡Porque no lo necesito! ¿Por qué no pruebas esto?, mira te va hacer bien, usted debe responder: ¡Porque no lo necesito, estoy completo! Vivimos tiempos pragmáticos, de conveniencia y utilidad; y en medio de tantas opciones Jesús es la mejor, pues no solo es verdadero, sino además es útil porque puede cambiar la vida; además de saciarla plenamente.


II. Tiempos de malas relaciones (3:18-22) “Casadas, estad sujetas a vuestros maridos. Maridos, amad a vuestras esposas, Hijos obedeced a vuestros padres. Padres no exasperéis a vuestros hijos”


Fue Publio Siro quien dijo: La familiaridad engendra menosprecio Desafortunadamente esto es cierto en estos tiempos que vivimos; ya que el mayor problema que enfrenta la sociedad actual es su incapacidad para relacionarse bien uno con otros. Tenemos que reconocer que nuestras relaciones humanas están por los suelos; y principalmente aquellas en las que hay mucha familiaridad. El matrimonio según algunos esta en decadencia; pues de 595,713 parejas que se unieron en matrimonio en 2005; 70 184 se divorcian; es decir 11 de cada 100 matrimonios se separan cada año, la razón problemas para relacionarse adecuadamente; sin embargo en otros muchos casos las relaciones entre hombres y mujeres toma tintes más dramáticos; pues la violencia física, sexual, psicológica y económica hacia las mujeres es ya un enorme problema; pues las estadísticas nos dicen que diariamente mueren de forma violenta 30 mujeres, mayormente en sus hogares. La rebeldía de los hijos hacia los padres igualmente esta presente en nuestros hogares; es más ahora hasta se exalta como si fuera un valor a seguir. Y que decir que los conflictos en el trabajo, con los vecinos y demás personas a nuestro alrededor. Sin embargo estos problemas no son tan actuales como muchos de ustedes suponen; son parte de nuestra humanidad; pero aunque han estado con nosotros siempre, no hemos aprendido por nuestra cuenta a resolverlos.


Los creyentes de Colosas de igual manera lidiaban con estos problemas en sus tiempos; pues por eso encontramos en la carta de Pablo a esta iglesia, instrucciones precisas de cómo establecer buenas relaciones en el matrimonio, con los hijos y con los demás. Primero Pablo, exhorta a las mujeres casadas a sujetarse a sus maridos como conviene en el Señor (v. 18) pero no debemos entender sujeción con obediencia incondicional o esclavitud; sino más bien tiene que ver con el reconocimiento del liderazgo del marido en el matrimonio; pues tenemos que reconocer que aunque muchas están casadas, pocas están verdaderamente unidas a sus maridos; pues viven de manera independiente; en estos días en el que los dos trabajan, hay la extraña filosofía de que cada quien su dinero y cada quien sus cosas y esto ha llevado a los matrimonios a ser una extraña sociedad individualista que a acarreado como consecuencia que la mujer no se sienta parte de su marido y por ende se da la posibilidad de prescindir de él. Pero Pablo es contundente cuando dice “Casadas estad sujetas a vuestros maridos” (v. 18) pero por otro lado los esposos también tienen responsabilidades que cumplir en aras de formar una buena relación con sus esposas Maridos, amad a vuestras mujeres y no seáis ásperos con ellas (v. 19) en el tiempo de Pablo, era el tiempo de los hombres en donde las mujeres eran prácticamente propiedad de sus maridos; y muchas mujeres sufrieron a causa de esto; cosas que no ha cambiado para muchas mujeres hoy en día; pero Pablo invita a los hombres a portarse amorosos, respetuosos, tiernos abnegados con ellas; la palabra ásperos literalmente significa amargos, somos llamados a no ser amargados, duros, rudos con ellas; el principio de una buena relación matrimonial es la sujeción de la esposa y la actitud amorosa del marido. Pero la Palabra de Dios también involucra la relación entre padres e hijos; por eso dice a los hijos: “Hijos, obedeced a vuestros padres” (v. 20) al principio mencionaba que la rebeldía ha sido parte de la juventud desde tiempos inmemoriales, pero tenemos que aceptar que en nuestros días se sobresalta a través de los medios masivos de comunicación. Una canción de un grupo juvenil muy popular dice así: Mi padre me grita otra vez, que me gasto mi futuro y su paz, con mi manera de ser; alguno de estos días voy a escapar para jugarme todo por un sueño si bien como padres dejamos mucho que desear; esto no debe ser un motivo para ser rebelde sin razón o propósito.


Pablo dice a los hijos quieren tener una buena relación con sus padre: obedezcan a sus voces la obediencia a los padres es un valor muy apreciado por Dios y manifestado en muchas ocasiones en la Biblia; pues forma parte de los 10 mandamientos; a demás que cumplirlo nos ira bien en la vida (Ex. 20: 12). Por otro lado, Pablo también anima a los padres a no provocar la ira de sus hijos (v. 21) El Dr. Benjamín Spock fue una reconocido escritos de temas de educación infantil en el siglo pasado; una de sus más conocidas filosofías era el de no castigar o poner limites a los hijos pues estos atentaban en contra de sus pequeñas personalidades y se lastima su autoestima; muchos, diría cientos de miles en el mundo adoptaron esta postura de educación, creando seres sin moral, y sin temor de nada; lo triste de esto es que mismo hijo del Dr. Spock murió suicidándose. Contrario y en respuesta a esto, muchos padres optaron por lo contrario, cayendo en el extremo que querer controlar hasta el más mínimo movimiento de sus hijos. ¿Pero de donde podemos sacar sabiduría de cómo educar y guiar a nuestros hijos? El Dr. Spock escribía sus libros de lo que le salía de la cabeza, muchos también; pero Dios nos dice en voz de la Biblia: “Padres no sean tan exigentes con sus hijos” (v. 21) ponemos demasiadas expectativas en ellos que acabamos abrumándolos hasta motivar su enojo. Debemos ser sabios y dejar que en ocasiones ellos mismos tomen sus decisiones y se equivoquen viviendo sus propias experiencias; pero siempre estando a su lado para manifestarles nuestro amor, cariño y respeto. Vivimos tiempos de malas relaciones; pero solo en Jesús podemos restablecerlas adecuadamente.


III. Tiempos Escatológicos (3:4) “cuando Cristo vuelva, ustedes compartirán su gloria”


¿Cuándo y como acabará el mundo? Esta parece ser una pregunta muy común en el corazón de las personas. Pues el simple hecho de pensarlo asusta. Desde hace mucho tiempo es una cuestión que inquieta a las personas. Se dice que en la cultura Tolteca, un profeta vaticino que en el futuro serían conquistados por los aztecas y que más adelante hombres barbadas con bastones destructores arrasarían con sus culturas, convirtiendo su mundo en algo mejor. Pero a lo largo de la historia ha habido profetas que han anunciado el fin del mundo, trayendo como consecuencia un enorme miedo y gran incertidumbre. Así pues demos sabido que el fin del mundo de ha predicho de diversas formas: enfriamiento del sol, ocasionando tinieblas y congelación de la tierra, guerras sangrientas entre las grandes potencias mundiales, enfermedades epidémicas incurables, computadoras que actúan por decisión propia, destructores terremotos, hasta el calentamiento global. Lo cierto es que en el ser humano existe y vive con temor a ¿Cómo y cuando será el fin del mundo? De esto se aprovechan charlatanes, profetas y hasta bienintencionados videntes que buscan asistir a las personas. Vivimos tiempos escatológicos, es decir estamos atentos, estudiando y vaticinando como será el futuro. Nuevamente San Pablo da a nuestros corazones esperanza de que el final no será tan desastroso como muchos los dicen. Pues él esta diciendo a los Colosenses: Si, pues habéis resucitado en Cristo buscad las cosas de arriba? (3: 1) en primer lugar Pablo nos llama a saber que si somos de Cristo nuestra mirada no debe estar puesta en las cosas futuras en la tierra, sino en los asuntos del cielo con Jesús. Nuevamente reitera a los Colosenses: Ponen la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra (3: 2) El apóstol exhorta a los creyentes de Colosas a no concentrarse en las cosas que involucran esta tierra; Dios no quiere que usted ame en demasía al mundo y sus cosas; sino que ponga su corazón y su mirada en lo que Dios tiene para usted en el cielo. Las personas tiene miedo a que el fin del mundo pueda estar cerca, a que el calentamiento global nos destruya; pero la carta a los Colosenses nos da esperanza; al decirnos que nuestra vida no consiste sola y exclusivamente en lo que ocurre en este mundo; además de que el final no va a culminar con el desastre nuclear o ambiental, sino con el regreso de Jesús Cuando Cristo, vuestra vida se manifieste, entonces también vosotros seréis manifestados con él en gloria (v. 4) Jesús va a regresar; Él lo prometió, y en eso debemos confiar; y lo hará por nosotros, viene por los suyos, por aquellos que confían y creen en Él. Jesús viene por ti. Ese es tu futuro; eso es lo que te espera si es que has aceptado a Jesús como tu salvador. Si la Biblia habla de un fin de esta tierra; pero el fin del cristiano en la tierra tiene que ver con su partida de la mano de Jesús a la patria celestial. ¿Te asusta el futuro? Confía en Jesús y cuando Él se manifieste, es decir cuando Él regrese; compartirá su gloria, su poder, su vida eterna contigo. Vivimos tiempos en donde el estudio de las cosas por venir (Escatología) roba al ser humano la tranquilidad y la esperanza. Esto ha sido así a lo largo de los siglos; sin embargo la Biblia nos dice que si hemos confiado en Jesús, podemos descansar que nuestro fin aquí en la tierra tiene que ver con el comienzo en el cielo; ¿cómo? ¿Cuándo? Cuando Jesús regrese por nosotros.


Desafío


Estos tiempos que vivimos no son muy diferentes a los que los Colosenses vivieron; pues también ellos tuvieron que lidiar con el pragmatismo o conveniencia de sus tiempos; pero Dios les mostró que la mejor opción en sus vidas es creer en Cristo, pues Él no solo es Dios, sino además cambia y llena nuestras vidas. Los Colosenses tuvieron igual que nosotros aprender a establecer buenas y sólidas relaciones, tomando en cuenta las recomendaciones de Dios. Así mismo el temor al futuro los paralizaba, como a muchos de nosotros; pero San Pablo habló diciendo que las cosas en el futuro no deben ser una tragedia, pues no debe ver la vida solamente limitada a lo que ocurre en este mundo; sino que hay uno celestial hacia donde debemos estar mirando, y al que llegaremos cuando Jesús venga por nosotros. Quieres vivir tiempos mejores, tiempos de claridad, tiempos de bendición, tiempos de poder, vívelos de la mano del poderoso Jesús.