Es mi culpa

Es mi culpa


Esta semana en nuestro país, “Chile,” ha sido la noticia mas comentada la determinación del Gobierno de entregar: “La píldora del día después” o “Postinor-2” a menores de 14 años “sin autorización de los padres.”

MI PREGUNTA ES:

¿Quién tiene la moral para levantar la voz y poner el dedito en la llaga sin que los otros 3 apunten hacia el mismo?

Donde esta la “reserva moral” que debería estar en manos de la iglesia?…
-Soy madre de 3 niños, dos de ellos adolescentes y no me gusta lo que veo en la sociedad y tampoco lo que veo en la iglesia.

Soy pastora Evangélica, ordenada al ministerio pues nuestra corporación acepta el llamado de Dios en la mujer también y hoy “quiero poner el dedo en la llaga”

I. LA CULPA DE NOSOTROS LOS PADRES Y DEL GOBIERNO.

Cuanto trabajo tenemos!…y cuanto estorban nuestros hijos!
Cuando el Gobierno de turno Implanto la Jornada escolar Completa aplaudimos absortos casi con un hilito de baba asomando.

¡Por fin! Tendríamos más tiempo para estar solos y pensar un “nosotros mismos”.

¡Por fin! No tendríamos a nuestros hijos en la tarde en casa, después de todo se aburren.

Mejor aún, almuerzan en el colegio, comen alimentos secos y fríos y cuando ya es mas su fortuna los mas grandes les quitan la colación… Pero nosotros estamos tranquilos… algunas de ustedes señoras en la peluquería y algunos caballeros tienen tiempo hasta para jugar tenis..¡Gracias Señores del Gobierno!.. Ya casi no veo a mis hijos!!

Algunos se pasaran los días en el gimnasio, reuniones sociales, la iglesia, círculos de chismología, novelas, noticieros… ah! Eso si, que escándalo lo que vemos en televisión…ummm…. UN MOMENTO!… mira a tu hija de 14 años… parece que el vientre le esta creciendo!… LLÉVALA AL GIMNASIO! … o no?…

II. LA CULPA DE LA IGLESIA.

Saludos señores obispos, curitas, pastores, etc. Me gustaría tanto poder decirle a nuestra sociedad que están a salvo en nuestras manos!


Me gustaría tanto que bajemos de nuestros altares y atendamos a aquellas personas que están a “nuestro cuidado”.

Donde estábamos cuando la sociedad comenzó a separarnos de nuestros hijos?


Donde estábamos cuando el Gobierno determino que nuestras niñas de 14 años pueden abortar sin que sus padres tengan la menor idea…

Finalmente… quien esta haciendo un mal trabajo?

El asunto no es la píldora, el problema somos nosotros!

Y como no quiero que usted sienta culpa, prefiero asumirla toda yo.

¡ES MI CULPA!

Como líder religiosa es mi culpa. Es mi culpa no enseñarte que los hijos son un regalo de Dios: “Herencia de Jehová son los hijos y cosa de estima el fruto del vientre! (Salmo 127:3)

Es mi culpa, no decirte que los valores morales y los mejores consejos para criar a tus hijos no están en manos de un Gobierno sino en la Biblia, 6.Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón:

7Y las repetirás á tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes:8Y has de atarlas por señal en tu mano, y estarán por frontales entre tus ojos:9Y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus portadas. (Deuteronomio 6:5-9) En este pasaje claramente nos habla de la comunicación con nuestros hijos…. Habla con ellos!!

Es mi culpa descuidarte iglesia amada y encerrarme en discusiones y peleas egoístas.

Es mi culpa llenar tu corazón de odio por tus hermanos y no de perdón y compasión.

Es mi culpa no pedirte que optes por la vida! Elige la vida y vivirán tú y tu descendencia, amando al Señor tu Dios.


COMO MADRE ES MI CULPA.

Es mi culpa hijo querido por dejarte solo y permitir que aprendieras a ser hombre con hombres que no lo son.

Es mi culpa no haberte enseñado que el sexo es maravilloso si lo hacer en el tiempo, la forma y el fin correcto. No es para padecer ni sufrir, es para ser feliz y felices de verdad.

Es mi culpa hija querida no ver tus ojos húmedos y tristes llenos de preguntas sin respuesta.

Es mi culpa mi niñita por pensar solo en mí… Es mi culpa por no mirar lo linda y hermosa que te estabas poniendo.

Es mi culpa princesita no decirte que el que quiera ponerte una mano encima debe ganárselo y merecerlo porque eres hermosa creación de Dios… Puedo dar gracias a Dios por asumir esta culpa, lo bueno es que lo hice a tiempo y espero que mis hijos sean los mejores hombres y mi hija sea una gran mujer, estoy trabajando para eso!

Y si no lo llegaran a ser.. Aún podrán contar con mami. Aún podrán sentarse frente a mi escritorio, cerrar la puerta y decirme, hablemos!


Mi tiempo con ellos no es tiempo perdido, es tiempo invertido.


Que Dios les bendiga, a su servicio y el de Dios primeramente.